sábado, 14 de noviembre de 2020

(sin) vida

 Hacía mucho tiempo que no sentía esta sensación de estar atrapada en un círculo infinito del cual siento que no hay escapatoria.

Me domina la impotencia, y aunque quiera e intente liberarme de ella, el pánico se me adelanta y toma mi cuerpo, soy consciente de lo que pasa, vaya si lo soy, pero no puedo intervenir en esta discusión.

Me quedo ahí, inmóvil, sin emitir movimiento alguno, paralizada por el miedo, sin poder siquiera emitir una sola palabra, un sonido, lo que sea que me haga sentir que todavía estoy presente en esta guerra de sentimientos.

Me encierro en mi mundo, no tengo otra opción, ahí me quedo callada, sintiéndome humillada por otra vez no haber podido hacer nada...

¿Pero qué podía hacer?

Mis guerras también son internas, intento luchar contra mi cuerpo, juro que lo hago, pero en otra batalla fracasada por ganarle a mis miedos caigo en un perfecto sueño que de igual manera luego se convierte en pesadilla.

Y así otro día más de mi dulce vida.

domingo, 20 de septiembre de 2020

Triste nota de suicidio

Pequeña luna, tan resplandeciente en este pequeño viernes trece, hay tantas cosas que tengo que decirte, una de ellas es mi muerte, he decidido hacerlo hoy, sin dañar a quien no se lo merece, la depresión me consume, sé muy bien que lo comprendes.

Estoy ahora como tú, encerrada en mi triste cuarto, mis ojos sepultado de dolor, no logran controlar el llanto, que tarde o temprano desaparecerá, al unirse con la roja sangre de mis cortes. 

Mis nudillos ya no aguantan, están cansados de tanto golpear la pared y no solucionar nada.

Quisiera gritar, y que la respiración se me entrecorte, morir de depresión le llaman, aquellos que se asesinan a cortes. Sin embargo, no requiero acabar tan mal, en la vida no sonreí, mi mayor don fue llorar. El caos en mi cabeza empezó a nublarse de pensamientos suicidas, si lo cortes no hicieron nada. 

¿Por qué no terminar a balazos a la poeta rota de la sonrisa fingida?

Pequeña luna, ahora lo he recordado, aquella cita que me rompió el alma, a mis pensamientos ha llegado: "no era poesía, simplemente retrataba, no inventaba versos, eran peligrosas armas, capaces de destruir consigo su triste sensibilidad humana."

Mi cuaderno lleno de poesía, sin polvo se ha quedado. ¿ Cuántos recuerdos y heridas traerá ahora que le escriba entre esas inestables hojas que la depresión ha ganado? Nadie podría haber sido tan bueno como lo fuiste tú, desde el primer día hasta ahora, me cuidaste, sin importar como fuera a terminar en un futuro.

Moriré contigo, sin importar lo que la gente diga. ¿A quién llamarán huérfana si ya no estaré con vida? ¿De qué te sirve necesitarme por las noches? Si cuando estoy no me notas.

No tiene apuro, no tiene caso, morir es la solución, debido a tanto fracaso. Mi ausencia será el punto de equilibrio, cuando intentes buscarme, y sin respiración te quedes, si me convertiste en tu musa, déjame ir, cual verso entre agonía se muere.

El dolor explota en mi mente, la música ya no me llena, este verso ha quedado solo. Fuiste el brillo que se acercó, intentado ayudarme, te alejaste al darte cuenta, que el desastre no siempre es lo mismo que el arte. Te eternicé en escritos para que puedas recordarme, como aquel triste poeta, que debido a su inestabilidad ha decidido suicidarse. Deja que muera, no vas a extrañarme, bien dijiste aquel día, no le cuentes tus problemas a la gente, disípalos por tu parte. 

No lo había notado, pequeña luna, pero mi poesía estaba rota desde hace micho tiempo atrás. Mis letras me suicidaron en cada verso roto de estas simples hojas...

Lo siento.

Apenas logro trazar nuevos versos, me he desgastado tanto, que mis dedos han quedado obsoletos. Sin embargo... quiero escribir con sangre, ésta última cita: "ya no quedan minutos de poema, la poeta se ha suicidado."

miércoles, 9 de septiembre de 2020

Recovecos de mi alma


Necesito tiempo.

Para mí.

Para lamer mis heridas y sanarme.

Para reencontrarme.

Reconstruirme.

Necesito tiempo para volver a ser yo.

Para aprender a ser fuerte.

Para dejar de romperme por todo.

Y llorar por nada.

Necesito tiempo para coger perspectiva.

Poder ver que en realidad lo malo no es tan malo.

Y tal vez darme cuenta de que lo bueno tampoco es tan bueno.

Para abrazar fuerte y cuidar lo que vale la pena.

Y dejar ir lo que no me permite florecer.

Necesito tiempo para volver a estar bien.

Aprender a sonreír de nuevo.

Poder luchar por lo que quiero.

Y poder seguir adelante sin sentir que dejo mis pedazos rotos por el camino.





viernes, 14 de agosto de 2020

Viajo

Viajo al ritmo de melodías etéreas y el tiempo se detiene; ya no existen los disturbios, ni los días, ni mi vida, ni mi aliento.                                       

Viajo a un lugar desconocido, justo en el centro de la nada; en el punto exacto entre la oscuridad que me apaga, y su luz que resplandece para hacerme brillar.

Viajo a su voz, a mi sonrisa, a mi olvido y a su recuerdo, viajo al café de sus ojos, y a la picardía de su mirada.

Viajo al silencio de su alma, y a mi pérdida, al infinito letargo que se llevó a mi estrella.

Viajo a la poesía de mis noches, a la calma de un mar abierto, indomable y libre; al anhelo de la lluvia, a un sueño frustrado; justo allí donde habitan mis ilusiones dormidas.

Viajo en un barco perdido, en letras y ritmos ajenos; viajo en mi adiós y a su huida, a mi escape y a su inocencia.

Voy como quien no espera nada, sumida en un suspiro eterno; dueña de una mirada algo ausente, ese es mi corazón viajero.

jueves, 6 de agosto de 2020

Tal vez

Los ojos son el reflejo del alma, y cada vez que me veo en los tuyos, puedo  ver las heridas que no han sanado.
Podemos escondernos detrás de una mentira, podemos ocultar el dolor, pero lo que hay en la mirada no lo puedes disfrazar.
Mi dolor y tu indiferencia, son sentimientos que no nos atrevemos a enfrentar.
Te conozco muy bien, no importa cuanto quieras imponer, al igual que yo, también tienes cierta sensibilidad; sé cuándo algo está mal, lo presiento con solo mirarte, aunque me quieras engañar e intentes ocultarlo todo.
Sigues poniendo la venda en tus ojos para no mirarme.
Sigues escondiéndote y yo trato de buscarte en cualquier sitio.
Sigues demostrando cobardía; porque es mucho más fácil ignorar todo que enfrentar las cosas.
Ambos estamos negando lo que sentimos, no aceptamos que estamos haciendo mal, nos seguimos lastimando inconscientemente, yo fingiendo que estoy bien al momento de verte y tú creyéndolo y también aparentamos que todo es perfecto, cuando en realidad, las cosas son muy diferente.
Hablamos y me duele ser hipócrita porque en realidad no quisiera verte, estoy tan enojada contigo, estoy mintiéndote, engañándote.
Tal vez tú tienes la mejor intención, me hablas sin ningún rencor y te muestras sonriente.
Aún así, sigues sin acercarte, sin demostrar que tienes la mínima preocupación, reflejas que no te interesa nada y sigues con tu camino mientras yo voy por el mío.
Tal vez, cuando nos demos el tiempo volveremos a ser transparentes y nos mostraremos tal y como nos sentimos ahora, podremos sanar heridas, dejarnos ir y empezar de nuevo.
Atte. Tu mente.

martes, 21 de julio de 2020

Instantes

Por unos instantes mis ojos
ya están cansados
para seguir adelante.

Me he embriagado de absoluta
tristeza y soledad
la cual es demasiado apabullante.

Quisiera decir que encuentro
consuelo en vacías palabras bonitas,
pero incluso ni eso.

Supongo que estoy mal
y que mi mente está 
más retorcida que antes.

Ya no quiero perseguir eso que
llaman "felicidad", ni tampoco
cumplir sueños inalcanzables.

Solo deseo una pizca de 
sosiego para reencontrarme 
conmigo misma y de alguna
manera lograr salvarme.

miércoles, 17 de junio de 2020

Chica tonta

Conocí a una chica
es muy tonta
pero también es muy preciosa.
Sus padres la mantienen encerrada
en su casa de cristal,
protegiéndola como la princesa
que es.

Pero esta chica tonta,
no es tan tonta,
a la primera oportunidad
escapa de su castillo
para explorar su sexualidad,
por ende vive eternamente encerrada
hasta tener la edad indicada.

Qué chica más tonta
(era lo que pensaba),
solo podía hablarme por chismes,
amigas, fiestas, rebeldía y
aventuras con sus ex´s.
Pero por una extraña razón
podía escucharla todo el día
sin parpadear;
no me interesaba en lo más mínimo
pero ahí estaba,
riendo de sus anécdotas
como si me hubieran pasado a mí.

Eres una chica muy tonta, 
tendrás problemas de nuevo,
(es lo que suelo decirle)
antes de escaparse para venir a mi casa.
Cogemos como animales
porque le encanta cuando es duro,
yo suelo ser lento y romántico
pero en esos momentos
yo solo deseo complacerla.
Hacerla mía.

Chica tonta,
(esto es para ti).

Lamento que una relación
no funcione con nosotros,
porque solo estoy enamorado
de tu belleza, y tú
del placer que te hago sentir.
Fue lindo ser un chico tonto
contigo,
pero no quiero romper tu corazón.

Atte: Todos los chicos de tu vida.

martes, 9 de junio de 2020

Querida muerte

Muchas personas sienten
el miedo a la muerte
en sus últimos instantes,
a lo largo de su vida
piensan en ella como un
momento que pasará, 
nada más.

Desearía poder hacer lo mismo,
pero en cambio
lo siento en las noches,
lo siento en el borde de mi cama,
acariciándome el pelo
y susurrándome al oído:
un día te tocará a ti.
¿Estás listo?
¿o aún me temes?
Qué vacío más oscuro
y aterrador.

Aún soy joven
pero el tiempo no se detiene
los días pasan,
y la verdad se asoma;
me estoy volviendo vieja.

Apenas recuerdo cuando era niña y 
el reflejo que veo en el espejo
ya no lo reconozco.
El futuro me aterra
desearía ser joven por siempre.

viernes, 15 de mayo de 2020

Te mereces

Te mereces a alguien a quien se le escapen sonrisas al verte.
Ya sea que estés desastroso o que estés lindo, que estés enfadado o contento.
Porque lo importante es eso, que estás.
Que esa persona note actitudes tuyas que ni tú creías poseer.
Que además de ver galaxias en tus ojos, te cuente que descubrió esas manchitas raras que tienes en el iris.
Que te bese en los labios y en medio una sonrisa, que te bese en la mejilla y la nariz, y que lo haga riéndose, halagando esas pequeñas pecas que recorren todo tu cuerpo y a ti no te gustan.
Que con un beso en la frente, delicado y sintiendo que te quiebras, pueda silenciar los rugidos de la tormenta que te persiguen sin descanso.
Que no tenga miedo de amarte fuerte porque sabe que a pesar de todo lo que eres, no vales la pena sino el esfuerzo.
Que entienda tus defectos y que a pesar de ellos, decida quedarse.

sábado, 9 de mayo de 2020

Hay gente

Asisto a un funeral todos los días 
hay gente
que llora
que ríe
que añora
que recuerda
que ama
que odia
que se cae a pedazos.

Hay gente
y estoy yo
fría
pálida
solitaria
inerte
llorando
riendo
añorando
recordando
amando
odiándome
a pedazos cayéndome.

Hay gente
que me observa
que me ayuda
que me esquiva
que me ignora.

Hay gente
y estoy yo,
fría
pálida
solitaria
inerte
muerta,
hay gente
y estoy yo,
¿y tú?

lunes, 4 de mayo de 2020

La borrachera

Todos los caminos me llevan aquí:
A la impenetrable soledad.
He tratado de dormir
pero ahora la borrachera
tiene poder sobre mí,
ella decide cuando debo dormir.
Pocas noches estoy tan rota como esta.
Y me sienta bien.
¿La verdad?
Jamás quiero volver a dormir.
Porque sé que cuando despierte 
volveré a ser esa persona
esa persona que finge, sonríe y dice que todo está bien,
pero nada está bien.
Esta vida no está bien.
Noches de madrugada,
cuando nadie observa,
cuando solo tienes a la luna de testigo
es cuando puedes ser tu mismo.
Que lástima que nos pasemos toda una vida fingiendo.
Hemos nacido con el don de pensar
y de aquí hasta que fallezcamos
estaremos malditos, estaremos rotos.
Maldita borrachera,
cuando sucumbes al vicio
pierdes tu voluntad
y empiezas a ser un ser de impulsos.
La borrachera que me causa este cigarro
y este ron
es la sucia realidad,
las nauseas y el mareo que me son provocados
es el malestar de vivir,
el malestar de tener una vida sinsentido.
Cuando despierte esta mañana,
seré un ser arrepentido.

martes, 21 de abril de 2020

Maldita poesía

Maldita poesía,
maldita, maldito...
Mi poesía empezó a estar maldita
después de ti.
Jamás habían salido versos
más exquisitos
que cuando estaba contigo
y cuando sufrí por ti.

No hubo mejor momento.
Todo lo que salía de mi mente
era doloroso, sublime, sentimental,
casi que podías saborear
ese dolor,
el dolor de tu partida.

Ahora que ha pasado el tiempo,
ahora que ya no hay dolor
solo queda vacío
y un alma en pena.

Ahora que no estás,
solo tengo de consuelo
tu recuerdo y
mi poesía barata.

lunes, 30 de marzo de 2020

Te sigo escribiendo

Te sigo escribiendo.
Luchan en mi interior dos fuerzas.
Una ríe a carcajadas, exclamando que soy patética.
La otra susurra, casi en silencio,
que es un buen momento para soltarte.
Algunas veces es por odio.
Otras por aflicción.
Y es que duele, el cuerpo y la mente se fatigan.
La mayor parte del tiempo es por amor,
después,
intento razonar, pero soy demasiado testaruda.
La primera voz es fuerte, aunque,
no presto atención, ya me conoces.
Te sigo escribiendo, en la cama, en la habitación,
en la antesala, en mis viajes, y hoy, antes de verle.
El problema no es la métrica, ni el contenido.
El problema soy yo, mi mente, mis pensamientos,
mis sentimientos.
Te sigo escribiendo, pues parece que te conozco más a ti,
que a mí.
Te describo como sueños, como magia, como vida.
Sé que no volverás a leerme.
En realidad eso ya no importa.
No significa que aún te amo.
Es una forma de dejarte ir, porque sé
que con cada hoja que se desprende,
más me desvanezco.
Permanecerás sólo en las letras y seré libre.
Suena patético, pero funciona.
Te conozco tanto, que sigo escribiendo a la persona que fuiste,
aunque en ésta descripción tuya,
no haya espacio para decir la verdad.



miércoles, 18 de marzo de 2020

Extraño

Aunque no lo diga, aunque no lo haga notar, aunque no quiero que lo sepas; te extraño.
Extraño el sonido de tu voz en todas y cada una de sus facetas; desde tu voz ronca y sexy cuando enfermabas hasta tu voz media dormida a las 7 am.
Extraño cuando era de madrugada y me contabas las inseguridades que te hacían sentir vulnerable y yo con gusto las abrazaba, cuando algo te apasionaba tanto que me lo contabas emocionado y yo te escuchaba, encantada de ti.
Extraño cuando coincidíamos en todo lo que decíamos o pensábamos y sólo nos reíamos, extraño hacerte reír, porque no hay mejor sonido que el de tu sonrisa.
Extraño preguntarte "qué tal te fue el día", si comiste bien, si tuviste algún percance, si algo nuevo te pasó, si hay algo de lo que deberíamos reírnos o si vamos a debatir sobre algún tema.
Extraño los maratones de miradas furtivas, las largas conversaciones de madrugada, los besos robados y el sexo desenfrenado.
Extraño ser empalagosa, decirte todo lo cursi que se me ocurre y recordarte que te quiero, que te quise y que supuse que cambiarías.
Te extraño a ti, y a la persona que me hacías sentir mientras estaba contigo.

sábado, 22 de febrero de 2020

Sedúceme

"Sacúdeme, enmudéceme.
Sedúceme, sucédeme.
Sacúdeme los cimientos, las prisas;
aumenta el valor de mis desvelos,
quítame el frío del alma;
hazme ver la belleza en lo ordinario,
concédeme el placer de tu lengua en mis labios.
Crea terremotos de emociones,
inunda los huecos de mi rutina,
destruye la ausencia,
destruye el dolor.
Hazme perder el equilibrio.
Sacúdeme.
Enmudéceme los pensamientos,
el grito de las sombras que recorren
entre los pasillos de mi mente.
Enmudéceme la pena, la fatiga de la espera,
enmudéceme estas manos desesperadas
que llaman tu presencia
y estos dedos:
mendigos de lo trágico, suplicando por una piel
que ha aprendido a borrar sus huellas.

Sedúceme a deshora,
en la intimidad de los silencios,
en la soledad e todas las urbes;
sedúceme y dame el placer de tocarte,
de sentir tu aroma por dentro,
de introducirme en tu vida por fuera;
sedúceme los ojos, con tus labios curvos;
sedúceme los poros, con tu piel tan suave;
sedúceme la mente, con tu verbo elocuente;
sedúceme completa o por partes,
siendo tan complejo en tus horas bajas,
tan bello en tu infinita existencia.
Sedúceme siendo hermosa, cuando vuelas,
sedúceme siendo niña, cuando lloras;
sedúceme siendo mujer, cuando amas
que yo me enamoro de todo y nada
cuando nada pueda hacerte justicia
cuando todo tenga que ver contigo.

Sedúceme cuando quieras,
que te espero sin conocerte todavía.
Sedúceme siempre, con apuros o sin ellos,
que yo no voy a marcharme, lo prometo.
Sedúceme sin pedir permiso,
hazme la vida imposible.
Sedúceme bajo las sombras,
hazte irreemplazable.
Conviértete en el villano,
conquista, guerrero, todas las colonias
de mis penas.
Hazme tuya, cámbiame.
Que no te reconozca mi pasado,
que no pueda contra ti mi nostalgia,
que se rindan mis fuerzas para olvidarte,
que se abra el cielo de la fortuna
y me sorprenda naufragando en tu garganta.
Sacúdeme cuando me quede quita,
enmudéceme con tus labios:
quítame las palabras boca a boca;
sedúceme la vida, sedúceme la inocencia;
sedúceme y no te fijes en las horas
que todas se hacen eternas
cuando el bucle son tus brazos."

domingo, 26 de enero de 2020

Sonreír

A veces me pregunto cómo será la risa de alguien que ha estado roto durante tanto tiempo sin poder hacer nada.
Sin siquiera moverse del charco ni de esas nubes grises que ciernen sobre él.
Esa impotencia de no saber qué hacer ni cómo hacerlo ni con quién.
No todo es color de hormiga, a veces, la tristeza tiene un color bonito en los ojos que hace brillar los tuyos cuando nada tiene sentido.
Tiende su mano en tu hombro cuando las explicaciones lo son todo o como cuando terminas encontrando la respuesta y quieres jalar el gatillo sobre la sien, porque no es lo que esperabas.
Esa gente que no se cansa de perseguir el laberinto es la que termina encontrando la salida, un día, mientras el sol yace radiante y espectacular, allí, a donde van a parar las cosas que nos hemos guardado por miedo a herir, o herirnos.
Y, entonces, nos mira a distancia y lo hace como nadie lo ha hecho antes, precipitándose al precipicio lanzando "ojalás" al aire queriendo acertar siquiera una vez en la vida.
Luego tú caminas en la misma dirección, como polos opuestos como esas masas que se atraen sin siquiera quererlo, como esa energía rotativa que termina encontrándose porque el mundo no es cuadrado y una vez estando respiración contra respiración, taquicardia contra taquicardia, te besa.
Y cierras esos ojos que tanto han sabido de lluvia y esta vez será la última tormenta que tocara tus mejillas.

jueves, 2 de enero de 2020

Quería

Quería que te quedaras.
No sé.
Siempre me ha gustado el concepto quedarse, aunque debo admitir que algunos me causan escalofríos por las noches al recordarlos.
Algunas personas se quedan mientras ya se encuentran a una distancia sustancial, porque les da miedo quedarse en los lugares donde han reído de una forma demente y victoriosa.
Recuerdo que me susurrabas "listen before i go" al oído, tan cerca que podía escuchar el vacío de tu alma.
Tanto que empezaba a comprender que las historias tienen siempre un final escrito desde que empiezan incluso a pensarlas.
Yo ya estaba hace tantos años rota, cariño.
No te preocupes.
Cuando la soledad tocó la puerta: tú huiste, yo le tendí una mano.
Quiero decirte que desde tu ida, mi vida es una victoria en declive: porque en cualquier momento miraré como sonríes con otra al lado y me sentiré en paz contigo y en guerra conmigo.
Porque no hay nada más bonito que amar, aunque no sea a ti.