sábado, 22 de febrero de 2020

Sedúceme

"Sacúdeme, enmudéceme.
Sedúceme, sucédeme.
Sacúdeme los cimientos, las prisas;
aumenta el valor de mis desvelos,
quítame el frío del alma;
hazme ver la belleza en lo ordinario,
concédeme el placer de tu lengua en mis labios.
Crea terremotos de emociones,
inunda los huecos de mi rutina,
destruye la ausencia,
destruye el dolor.
Hazme perder el equilibrio.
Sacúdeme.
Enmudéceme los pensamientos,
el grito de las sombras que recorren
entre los pasillos de mi mente.
Enmudéceme la pena, la fatiga de la espera,
enmudéceme estas manos desesperadas
que llaman tu presencia
y estos dedos:
mendigos de lo trágico, suplicando por una piel
que ha aprendido a borrar sus huellas.

Sedúceme a deshora,
en la intimidad de los silencios,
en la soledad e todas las urbes;
sedúceme y dame el placer de tocarte,
de sentir tu aroma por dentro,
de introducirme en tu vida por fuera;
sedúceme los ojos, con tus labios curvos;
sedúceme los poros, con tu piel tan suave;
sedúceme la mente, con tu verbo elocuente;
sedúceme completa o por partes,
siendo tan complejo en tus horas bajas,
tan bello en tu infinita existencia.
Sedúceme siendo hermosa, cuando vuelas,
sedúceme siendo niña, cuando lloras;
sedúceme siendo mujer, cuando amas
que yo me enamoro de todo y nada
cuando nada pueda hacerte justicia
cuando todo tenga que ver contigo.

Sedúceme cuando quieras,
que te espero sin conocerte todavía.
Sedúceme siempre, con apuros o sin ellos,
que yo no voy a marcharme, lo prometo.
Sedúceme sin pedir permiso,
hazme la vida imposible.
Sedúceme bajo las sombras,
hazte irreemplazable.
Conviértete en el villano,
conquista, guerrero, todas las colonias
de mis penas.
Hazme tuya, cámbiame.
Que no te reconozca mi pasado,
que no pueda contra ti mi nostalgia,
que se rindan mis fuerzas para olvidarte,
que se abra el cielo de la fortuna
y me sorprenda naufragando en tu garganta.
Sacúdeme cuando me quede quita,
enmudéceme con tus labios:
quítame las palabras boca a boca;
sedúceme la vida, sedúceme la inocencia;
sedúceme y no te fijes en las horas
que todas se hacen eternas
cuando el bucle son tus brazos."